Bonificación tripartita

Niacinamida: el activo que más confusiones genera (y cómo recomendarlo con criterio profesional)

La niacinamida lleva años en el top de activos más recomendados… y también en el top de activos peor entendidos por el consumidor. Su versatilidad ha creado un problema: muchas personas no saben cuándo necesitan niacinamida, qué concentración es adecuada o cómo combinarla.
En Farmaschool vemos cada día confusiones que afectan directamente al resultado final del paciente.

1. La base científica que todo farmacéutico debe conocer

La niacinamida (vitamina B3) actúa sobre múltiples rutas biológicas:

  • Aumenta la síntesis de ceramidas → refuerza la barrera cutánea

  • Reduce mediadores inflamatorios → útil en piel sensible, rosácea leve

  • Regula la producción de sebo

  • Mejora la luminosidad mediante reducción de transferencia de melanosomas

  • Disminuye la pérdida transepidérmica de agua

Es un activo multipotente, pero no omnipotente.

2. ¿Con qué pieles funciona realmente?

La niacinamida no es para todo el mundo. Funciona especialmente bien en:

  • Piel sensible

  • Piel reactiva

  • Rosácea leve

  • Piel grasa

  • Piel deshidratada

  • Rutinas con retinoides (como regulador de tolerancia)

3. Concentraciones: el gran malentendido

  • 2–5% → barrera, hidratación, regulación suave

  • 10% → sebo, manchas leves, soporte a retinoides

  • 10% → más irritación y ningún beneficio clínicamente relevante

En farmacia, la recomendación más segura y eficaz suele estar entre 2% y 5%.

4. Combinaciones inteligentes

🏆 Las mejores combinaciones para farmacia

  • Niacinamida + retinoides → menos irritación

  • Niacinamida + ácido hialurónico → hidratación + barrera

  • Niacinamida + antioxidantes → luminosidad equilibrada

  • Niacinamida + PHA → piel sensible y textura

Combinaciones problemáticas

  • Niacinamida + altas concentraciones de vitamina C pura → irritación en piel sensible

  • Niacinamida + exfoliantes fuertes → sobreestimulación

5. El protocolo Farmaschool para recomendarla

  1. Identifica el objetivo prioritario

  2. Evalúa tolerancia previa

  3. Escoge concentración adecuada

  4. Explica expectativas realistas (4–8 semanas)

  5. Ajusta según evolución

La niacinamida no es una moda: es una herramienta sólida cuando se usa con criterio. El papel del farmacéutico es evitar recomendaciones genéricas y transformar la rutina del paciente en una estrategia eficaz.

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