Por qué la farmacia no puede (ni debe) competir en precio
“En internet está más barato”.
Y aun así, vuelve.
El error de jugar en un terreno que no es el tuyo
La farmacia no puede competir con plataformas que no ofrecen:
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consejo,
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seguimiento,
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responsabilidad sanitaria,
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criterio profesional.
Intentarlo genera frustración y desgaste.
Lo que el precio no explica
El precio no explica:
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por qué ese producto es el adecuado,
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cómo usarlo bien,
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qué esperar,
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cuándo parar,
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cuándo derivar.
Eso lo explica un profesional.
El cambio de mentalidad necesario
Cuando el farmacéutico deja de justificarse por el precio y empieza a explicar el valor, la conversación cambia.
Y el paciente también.
La farmacia no vende barato.
La farmacia vende seguridad, acompañamiento y criterio.
Y eso no se puede clonar.

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