La confianza no se pide: se construye cada día
Hay un tipo de frase que define la confianza profesional:
“Dime lo que tú harías.”
Ese día el paciente no te está pidiendo un producto.
Te está pidiendo criterio. Te está pidiendo tu reputación.
La confianza no nace en la gran recomendación, nace en las microacciones
Se construye en:
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recordar un detalle (“¿cómo te fue con lo anterior?”)
-
no prometer milagros
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decir “esto no es para ti”
-
reconocer límites (“si empeora, médico”)
Y se destruye en:
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incoherencias
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exceso de seguridad sin base
-
recomendaciones cambiantes sin explicación
Confianza ≠ simpatía
Puedes ser simpática y no generar confianza.
Y puedes ser seria y generar confianza.
La confianza nace de:
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coherencia,
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honestidad,
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claridad,
-
seguimiento.
Método Farmaschool: “la triada de confianza”
1) Coherencia
Recomendar según criterios repetibles.
2) Transparencia
Explicar el por qué y los límites.
3) Seguimiento
“Vuelve y lo ajustamos.”
Cuando el paciente siente esto, baja defensas.
La confianza no se construye con frases perfectas.
Se construye con consistencia.
La farmacia que gana no es la que grita más.
Es la que transmite calma, criterio y verdad.

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